Una de las principales aplicaciones o pruebas de ensayos de la cámara MARTE es la deposición de polvo en condiciones Marcianas para estudiar su efecto sobre el sensor UV. En Marte debido a su leve atmósfera y ciclo meteorológico singular, hay siempre una gran cantidad de polvo en suspensión que afecta a los instrumentos en mayor o menor medida. El sensor UV es de los que más afectados están, ya que el polvo se deposita sobre su superficie e impide una lectura real de la radiación que le llega del Sol. El diseño del sensor con los imanes alrededor de los fotodiodos y el imán central, trata de concentrar el polvo hacia ellos mismos, minimizando la deposición sobre el área efectiva de lectura de los fotodiodos. Una de las cámaras del Curiosity permite la realización de fotografías, que sirve para estimar cuál es la deposición de polvo y calcular un offset a sumar sobre la lectura real de cada fotodiodo, para conocer cuál es la medida real de radiación en cada uno de los canales.
Desde un punto de vista tecnológico en la simulación con partículas con masa no despreciable, esta obviamente se comporta de distinta manera aquí en la Tierra que en Marte. Ello es debido a la gravedad que hace que las partículas en atmósferas de baja presión describan trayectorias balísticas. Lo que queremos recrear son recubrimientos optimos y que se realicen mediante el movimiento browniano de las partículas de polvo. Para ello en el interior de MARTE hubo que modificar la presión de la cámara de vacío (200mbar), siendo la presión base en Marte del orden de 7mbar. Además realizamos un incremento de temperatura entre la base de la cámara de vacío (donde esta en sensor UV) y la cámara de polvo. Este incremento de temperatura, junto con una atmósfera de baja presión produjeron celdas convectivas en el interior de la cámara de vacío que fueron las que interaccionaron con las partículas que caían a través del sistema generador de polvo (SGP), creando un tamiz regular de deposición sobre el fondo de la cámara de vacío. |